La industria del embalaje está impulsada por el desarrollo de cadenas de valor sostenibles y procesos de embalaje respetuosos con los recursos. En este contexto, el fabricante de maquinaria Rovema y el fabricante de papel especial Sappi, dos pioneros reconocidos internacionalmente en el campo de la sostenibilidad, han unido sus fuerzas en una colaboración estratégica. Las dos empresas ponen ahora la guinda a sus logros previos de desarrollo con el primer proyecto ejecutado con éxito para un conocido fabricante de cereales que ha transformado su producción totalmente automática a bolsas de papel de fondo plano con barrera sellable.

Sappi es un proveedor líder de productos y soluciones sostenibles de fibra de madera. Rovema se fijó en Sappi especialmente por sus conocimientos en el campo del embalaje y los papeles especiales con propiedades de barrera y sellado integradas. Al igual que Sappi, el fabricante de maquinaria de embalaje alemán se esfuerza por seguir desarrollándose como empresa sostenible, siguiendo su bien anclado modelo. Además de centrarse en optimizar la tecnología de la maquinaria existente, como la vida útil de las piezas de desgaste y la gestión general del reciclado, Rovema presta especial atención a la posibilidad de transformar los materiales del embalaje: a la reducción de los films de plástico hasta alcanzar más soluciones basadas en el papel y en materiales plásticos reciclables.

Sappi no dejó lugar a dudas con la excelente calidad de sus productos, su asesoramiento, su gama de productos y las excelentes propiedades de sus papeles barrera. Desde 2018, las dos empresas han estado trabajando conjuntamente y desarrollando como socios colaboradores soluciones de embalaje integradas como un paquete completo para los clientes que buscan posicionarse en el mercado de forma sostenible y, por tanto, orientados al futuro.

«Son pocos los fabricantes de papel que pueden combinar tan hábilmente propiedades decisivas como las funciones de barrera y la capacidad de sellado», afirma sobre la colaboración con Sappi Peter Lökös, Vice President Sales de Rovema GmbH. «Desde el principio tuvimos claro que podríamos sacar el máximo provecho al desarrollo de los proyectos de nuestros clientes colaborando de forma directa con Sappi. Así, los amplios conocimientos técnicos del experto en papeles especiales nos permitieron dar el paso decisivo». A diferencia de, por ejemplo, las bolsas de fondo plano y las bolsas planas hechas de materiales compuestos, las alternativas más sostenibles, a base de papel, tienen que tratarse con mucho más cuidado en el proceso de producción. En un proceso de embalaje automatizado, por ejemplo, el papel apenas tolera la transferencia de tensión y puede desgarrarse más fácilmente. Normalmente, también durante el llenado se debe prestar mucha más atención a la resistencia a la perforación del papel empleado.

René Köhler, Head of New Business Development Packaging Solutions, Division Innovation & Sustainability de Sappi, sabe lo importante que es la solicitud y el análisis precisos de las necesidades para elegir las calidades de papel adecuadas: «No es necesario utilizar papel de alta barrera como el Sappi Guard OHG siempre y cuando una variante graduada como el Sappi Guard Nature MS pueda también proporcionar una protección y funcionalidad óptimas. Para alcanzar unos resultados de primer nivel, el conocimiento detallado de los requisitos del producto, por un lado, y las propiedades específicas de los diferentes papeles, por otro, son de gran importancia para la elección final del material de embalaje».

Para que la utilización de los materiales de embalaje respetuosos con el medioambiente resulte un éxito también se requiere una alta precisión en la secuencia de movimiento general de la maquinaria, algo característico de Rovema. En comparación con la competencia, este fabricante de maquinaria confía en una tecnología transportadora y de sellado completamente controlada por un servomotor. Además, todos los pasos, desde la formación hasta el cierre de las bolsas, están perfectamente sincronizados hasta el más mínimo detalle para reducir al máximo la tensión sobre el material de embalaje.

Gracias a esta experiencia concentrada y a la colaboración integrada de ambos socios fue posible reducir las pérdidas de rendimiento habituales del 30 %, y de más al convertirse al material de embalaje basado en papel, a solo el 10 o 15 % en el proyecto piloto. Otros dos proyectos de aplicación ya están en la fase de prueba o se han iniciado. Las dos empresas también se consideran bien posicionadas para aplicar con éxito soluciones de embalaje basadas en el papel para las futuras necesidades de los clientes. La atención se centrará en la implantación para aplicaciones de alto rendimiento de los sectores de la confitería y los snacks. Los socios presentarán los primeros resultados pronto.