Grifoll Print Promotions, especialista en soluciones integrales para el mercado promocional, industrial y de packaging, ha sido reconocido por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) como fabricante de tatuajes temporales y maquillajes cosméticos. En esta entrevista su Director General, Toni Vert, explica lo que supone este reconocimiento para la empresa, así como sus planes futuros.

¿Qué diferencia a Grifoll Print Promotions de otros impresores del sector?

El gran valor diferencial de Grifoll se basa en su capacidad para imprimir en todo tipo de soportes con acabados especiales, ofreciendo soluciones innovadoras tanto en serigrafía, como en offset y digital.

¿Qué les ha supuesto ser reconocidos por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) como fabricante de tatuajes temporales y maquillajes cosméticos?

Ha sido una gran satisfacción, tanto personal como para el conjunto del equipo. Grifoll ya fabricaba tatuajes temporales y tarjetas de maquillajes para toda Europa con unas instalaciones y una composición equiparables a la regulación actual. Sin embargo, no existía un marco legislativo unificado que nos permitiese decir claramente que éramos un fabricante y distribuidor válido en toda Europa.

La llegada en 2013 de este marco legislativo obliga a todos los fabricantes y distribuidores a adaptarse a un estándar europeo único, lo que nos ha permitido por fin certificar oficialmente lo que ya éramos: fabricantes que cumplen con el estándar de calidad cosmética más exigente.

¿Hay otros impresores en España que dispongan de este reconocimiento?

No conocemos a nadie en Europa que, en este momento, ofrezca estas garantías de producción.

¿Qué cambios les ha supuesto tener que llevar a cabo para alcanzar este reconocimiento?

A grandes rasgos, conseguir este reconocimiento ha supuesto una inversión a tres niveles: la adaptación de las instalaciones, la validación de procesos y la formación específica de todo el equipo.

¿Creen que esto favorecerá la exportación de su producción?

Hasta 2013 la legislación no era uniforme en todos los países europeos. El cumplir con la legislación más exigente a nivel cosmético, evidentemente nos permite aumentar nuestra cuota de exportación. Siendo la regulación europea la más avanzada, nos posiciona en mercados no europeos como referente de calidad.

¿Cuál será el siguiente reto?

Todo apunta a que el futuro pasa por la impresión digital, y durante 2015 y 2016 Grifoll está desarrollando un programa de inversiones en maquinaria que nos permite ofrecer impresión de alta calidad en continuo. El reto está en dar a conocer estas soluciones a nuestros partners, para que exploten al máximo nuestras posibilidades de impresión en todo tipo de soportes con acabados especiales.

¿Cómo ven el sector en la actualidad?

Parece que poco a poco la situación de los últimos años se revierte. Las empresas del sector gráfico han sobrevivido a base de modificar su modelo de negocio, como virar hacia la venta online, o apostando por potenciar su valor diferencial, como en el caso de Grifoll. En internet podemos encontrar todas las cifras: cómo el sector se ha reducido a la mitad, la creación de empleo está estancada y la inversión se ha frenado. Pero al final creemos que es importante valorar cuál es tu posición en el mercado y cómo vas a afrontar tu futuro, independientemente de la situación sectorial. Por el momento, Grifoll encara el futuro ampliando su equipo, invirtiendo en nuevas soluciones de impresión y apostando por la calidad de sus productos.