En octubre ha tenido lugar en Barcelona el Sustainability in Packaging Europe para ofrecer más información sobre esta industria en constante evolución. En este encuentro Hallam presentó los cambios generales del sector como parte de las tendencias del mercado y sesión de perspectivas futuras.

¿Cuáles son algunas de las soluciones más interesantes e innovadoras que actualmente están influyendo en la industria del embalaje?

Afortunadamente, hay muchas. Las innovaciones que hemos visto lanzarse recientemente son bastante diversas, ya que abarcan varios segmentos del mercado, con aplicaciones que tienen requisitos funcionales bastante diferentes.

En el sector alimentario estamos viendo un aumento en el uso de recubrimientos renovables de base biológica. Un gran ejemplo es la entrega de alimentos, donde las comidas Just Eat se envían en cajas recubiertas con el revestimiento de barrera renovable a base de algas marinas de Notpla. En los envases de cartón para líquidos vemos innovación con cierres a base de fibra (Blue Ocean Closures) y pruebas de envases de cartón asépticos que no contienen aluminio.

Pulpac está cambiando la cara del mercado de fibras moldeadas con su tecnología de "moldeado en seco", que tiene varias aplicaciones potenciales, incluidas bolsitas, blísteres, tapas de tazas de café y bandejas de alimentos. Eso es antes de considerar los grandes avances que se están logrando en los envases que utilizan “fibras alternativas”, incluidos el cáñamo, el bagazo e incluso los desechos agrícolas. La competencia en las botellas de papel también se está intensificando a medida que mejora el desarrollo de barreras.

En bienes de consumo hay multitud de innovaciones entre las que elegir. En el mercado de la confitería estamos viendo inversiones a gran escala en maquinaria para permitir que Nestlé (Smarties & Kit Kat) y Mars utilicen el flow wrap a base de papel, reemplazando las variantes tradicionales de plástico. Pepsico también ha lanzado una bolsa exterior de papel para patatas fritas en paquetes múltiples bajo la marca Walkers. En el mercado de bebidas, hay muy pocas marcas que todavía usan anillos de plástico en las latas, y la mayoría de los paquetes múltiples ahora usan envoltorios de cartón o adornos de latas de cartón corrugado/plegable. Y hay muchos más.

¿Qué buscan los consumidores en los envases? ¿Cuáles son las tendencias de consumo de envases sostenibles?

La conciencia ambiental y el interés por los envases de los consumidores europeos nunca han sido tan altos y esto está teniendo un impacto significativo en las elecciones de productos que hacen. Hay varias tendencias que son consistentes en todos los mercados europeos. Los consumidores están dando prioridad a productos que minimicen la cantidad de materiales de embalaje que utilizan, embalajes que sean técnicamente “reciclables” pero también ampliamente reciclados, y embalajes que saben que se recogen a nivel nacional. Los consumidores más inteligentes ahora también están bien capacitados para detectar afirmaciones de lavado verde por parte de minoristas y marcas. ¡Los consumidores no son tontos!

El término de “sostenibilidad” es un término muy amplio, pero en general existe una preferencia de los consumidores por los envases a base de fibra, lo que está relacionado con el punto anterior y con el hecho de que la tasa de reciclaje de papel y cartón en Europa se sitúa actualmente en 71,4%.

¿Cuáles son los retos que las marcas tendrán que superar en los próximos años?

La regulación, en particular la Directiva sobre envases y residuos de envases (“PPWR”), será la que mayor influencia tendrá en el mercado de los envases durante los próximos cinco años y los propietarios de marcas deben alinearse con los requisitos si quieren seguir siendo competitivos en el mercado y evitar perder a sus clientes actuales.

Uno de los mayores desafíos para los propietarios de marcas que tienen una alta exposición a los envases de plástico será cómo asegurar la continuidad del suministro de polímero plástico reciclado de alta calidad. Por ejemplo, en la última propuesta del PPWR se estipula que los propietarios de marcas que vendan productos en envases de PET (principalmente botellas de bebidas y envases de alimentos) deberán utilizar un mínimo de 30 % de contenido reciclado a partir de 2030.

¿Qué cree que depara el futuro para los envases?

Este es un momento emocionante para cualquiera involucrado en la industria del embalaje. Hay muchos desafíos por delante, pero esos desafíos crearán enormes oportunidades para aquellos que miran hacia el futuro, están impulsados por la innovación y son lo suficientemente ágiles como para realizar cambios en la forma en que operan.

Los avances tecnológicos desempeñarán un papel importante en la mayoría de las etapas de la cadena de suministro de envases. La tecnología se puede utilizar para mejorar la transparencia en el abastecimiento de materias primas, los vehículos eléctricos reducirán las emisiones de carbono en la logística, la inversión en energía renovable reducirá los impactos en la producción, las aplicaciones y las marcas de agua digitales ayudarán a aumentar la eficiencia en la gestión de residuos y el reciclaje, así como en la conducción. el paso hacia envases reutilizables y retornables.

Por último, está claro que el futuro tiene una base biológica y con esto no nos referimos sólo a la madera. Los bioplásticos tendrán su lugar, especialmente cuando exista una infraestructura de apoyo para tratarlos al final de su vida útil (por ejemplo, compostaje industrial para envases de eventos deportivos y musicales, etc.). El borrador actual del PPWR sugiere que todas las cápsulas de café y bolsitas de té tendrán que ser compostables para 2030. Y eso es antes de que hablemos de recubrimientos de base biológica que reemplacen a los recubrimientos de PE fósil.